La noticia de que Graciela
Ocaña será la nueva interventora del PAMI cosechó
más elogios que críticas de parte de legisladores, dirigentes
sindicales y referentes culturales.
La noticia de que Graciela Ocaña será la
nueva interventora del PAMI -hoy será designada oficialmente- cosechó
más elogios que críticas de parte de legisladores, dirigentes
sindicales y referentes culturales.
Hebe de Bonafini, titular de Madres de Plaza de Mayo, se comunicó
con la funcionaria para saludarla y felicitarla por la "enorme valentía"
de haber aceptado el cargo pese a pertenecer al ARI.
Por su parte, el titular del bloque de diputados justicialistas, José
María Díaz Bancalari, consideró que Ocaña
"es muy buena para este cargo", que "tiene capacidad"
y que "este nombramiento está muy bien".
Desde la CGT oficial, su titular, Rodolfo Daer, apoyó la designación
de Ocaña en el cargo y sostuvo que la diputada "tiene los
valores y la capacidad" para llevar adelante el proceso de normalización
del PAMI.
No es el único que lo piensa. Miguel Bonasso, diputado del Partido
de la Revolución Democrática (PRD), destacó que la
decisión del Gobierno de nombrar a la diputada del ARI al frente
del PAMI "demuestra que se empieza a terminar con el Estado mafioso
en la Argentina". Aseguró, además, que Ocaña
"es una infatigable trabajadora e investigadora" y que ésta
es "una señal muy dura hacia ciertos grupos de poder, léase
los Barrionuevo o los Nosiglia, que han tenido indudable preponderancia
en el PAMI".
También el diputado socialista y dirigente gremial Ariel Basteiro
afirmó que ve esta designación "muy positiva"
porque sabe que Ocaña "va a buscar toda la eficiencia y la
transparencia" durante su gestión.
Daniel Carboneto, diputado del Polo Social, destacó que la nueva
interventora "es absoluta garantía de honestidad, transparencia
y contracción al trabajo" y confió en que "sabrá
rodearse de un buen equipo".
Pero no todas fueron flores. Raúl Castells, titular del Movimiento
Independiente de Jubilados y Desocupados, consideró a Ocaña
"una autoridad de facto, que va a tener el mismo final que tuvieron
los Matilde Menéndez, los Víctor Alderete y los Gaviola"
y reclamó "elecciones abiertas y democráticas"
para la elección del directorio del PAMI.
En una muestra de la crisis del ARI respecto a cómo ubicarse frente
al Gobierno de Néstor Kirchner, el resto de las críticas
que recibió la flamante interventora del PAMI vinieron de su propio
partido. Según el jefe del bloque de diputados del ARI, Eduardo
Macaluse, Ocaña está violando lo dispuesto por el último
congreso provincial partidario. Por eso van a pedirle que renuncie a su
banca de diputada.
Ocaña tomará licencia por unos meses en la Cámara
baja, pero no tiene en mente resignar su banca. "Tomé esta
decisión a título personal, pero no me voy del ARI",
anunció aunque admitió tener una "visión distinta"
a la de otros dirigentes de su partido acerca de cuál debe ser
el rol opositor frente al Gobierno nacional. "Ni el presidente Kirchner
ni el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, me han pedido que me
sume ni al kirchnerismo ni al peronismo. Simplemente me han pedido que
gestione el PAMI y eso es exactamente lo que voy a hacer", aseguró
Ocaña.
Fuente: Diario Clarín |