Institucionales

Un Distrito con recambio generacional
Entrevista al Dr. Oscar Sala flamante presidente del Distrito VIII de la Federación Bioquímica de la provincia de Buenos Aires que cubre una amplia extensión geográfica del centro bonaerense y tiene su sede en la ciudad de Azul. Un bioquímico con una larga trayectoria gremial en su región que además se desempeña actualmente como vocal titular de FABA en la comisión de Obras sociales.

• Dr. Oscar Sala, presidente del Distrito VIII de FABA

• ¿Cuándo fue elegido presidente del Distrito VIII y hasta cuándo dura su mandato?

En noviembre de 2016 y después de una asamblea asumo como presidente del Distrito VIII. Es la primera vez que ocupo este cargo, pero hace 32 años que participo en el Distrito y a lo largo de ese tiempo he ocupado la mayoría de los cargos, como secretario, vicepresidente, tesorero, protesorero, vocal. Fui además presidente del Círculo de Azul durante 6 años.
El estatuto del Distrito establece un mandato para el presidente de la Comisión Directiva de dos años con posibilidad a una reelección por dos años más.

•¿Cuál es la problemática más importante del Distrito VIII?

Es un distrito muy disperso. Uno de los problemas que genera dificultades de manejo y conducción es que somos pocos laboratorios distribuidos asimétricamente en localidades muy distantes entre sí. Las tres localidades con mayor densidad poblacional y trabajo que superan los 50.000 habitantes son: Azul, Olavarría y Tandil. Tandil a100 km y Olavarría a 50 km de la ciudad de Azul que está en el medio de ambas. En esas tres localidades se concentra la mayor parte de la población del distrito y la mayor cantidad de laboratorios. En todo el distrito hay un total de 90 laboratorios y el 40 a 45 % de ellos se encuentra en esas tres localidades.

• ¿Cuál es el número total de laboratorios y profesionales asociados al Distrito?

Estamos en 90 laboratorios y 180 a 190 bioquímicos federados. Y esta estadística se ha mantenido en los últimos años, una situación que se da en casi toda la provincia según las cifras que tiene FABA. Hay un total de casi 1500 laboratorios federados en la provincia de Buenos Aires, número que se mantiene estable a lo largo de los últimos años.
Y esto obedece fundamentalmente a la imposibilidad que tiene la gente joven de instalar un laboratorio, una relación de costo/beneficio desfavorable. Por un lado, porque no hay créditos accesibles y por otro porque para que un laboratorio sea sustentable tiene que ser muy competitivo, lo que significa una gran inversión.
En nuestra realidad, la de los pueblos muy chicos, una limitante inexorable es la escasa población. En nuestro Distrito hay pueblos de 5.000 habitantes, donde el bioquímico sabe que no va a crecer ni en volumen de trabajo, ni en complejidad de las prácticas y por eso las deriva y eso también incide en la ecuación económica.
Hoy en una localidad llamada Chillar, muy cerca de Azul, que tiene menos de 5.000 habitantes desde que se jubiló la única bioquímica, no hay laboratorio funcionado, la plaza está vacante.

• ¿Cómo es la estructura de funcionamiento del Distrito?

Hay cuatro Círculos Bioquímicos legalmente formalizados con personería jurídica y son los de: Tandil, Olavarría, Bolívar y Azul. Si bien hemos intentado estimular la formación de nuevos Círculos pero a veces por cuestiones internas o porque el número de laboratorios de alguna localidad no es suficiente para conformarlos no resultan presupuestariamente sustentables.
Los convenios con las obras so ciales regionales y prepagas que no tiene FABA se descentralizan en los Círculos bioquímicos para no generar en el Distrito una administración compleja. Son convenios zonales con algunas prepagas y obras sociales sindicales que son regionales o que son convenios anteriores a los que estableció FABA. El círculo de Azul tiene convenio con 22 a 23 obras sociales, algunas muy locales.
La accesibilidad que brindan los medios de comunicación hace que lleguemos de forma casi instantáneas a los asociados. Hay un intercambio permanente de información. Esto nos ha ayudado a no generar una gran infraestructura, difícil de solventar. Un distrito como el nuestro, limitado en su facturación, en relación al contexto de FABA, no puede generar grandes infraestructuras administrativas.

• ¿Qué objetivos se ha planteado para su gestión?

Uno de los objetivos de mi gestión va a ser mantener lo logrado durante la gestión de mi antecesor el Dr. Jorge Álvarez, que no ha sido poco, y profundizar las vías de comunicación para afianzar la relación del distrito hacia los federados y mejorar la participación de los colegas. Porque ese ha sido uno de los baluartes del distrito. Tratar de motivar al colega de los pueblos más lejanos a que se acerque y participe, se involucre y comprometa. Las dificultades del trabajo debemos resolverlas entre todos. Siempre ha sido un distrito muy participativo porque hay una gran vocación de convocatoria.
En el distrito se ha producido un recambio generacional. Porque si bien no se ha dado la apertura de nuevos laboratorios, se han incorporado profesionales jóvenes a laboratorios que ya estaban funcionando. Entonces los colegas mayores de 50 años ya están dando un paso al costado para dejar el espacio a los más jóvenes. De tal modo que el 50% de los miembros del Distrito tiene menos de 40 años.
Siempre compartí la idea de mantener una coherencia política y ciertos principios desde el punto de vista ético y gremial. Por lo general el bioquímico es muy leal, muy fiel a las instituciones que lo representan en tanto y en cuanto consideren que están bien representados.

• ¿Se requiere capacitación para la carrera dirigerencial?

Hoy día sí. Nuestro distrito ha promovido la capacitación permanentemente. Prueba de esto es que en las dos ediciones del Curso para Líderes y Dirigentes en Organizaciones de Salud organizados en forma conjunta entre FABA y FEMEBA, el distrito VIII, en la relación bioquímicos/laboratorios, fue uno de los de mayor participación.
Y ha sido mérito del Dr. Álvarez, que dentro de su política siempre estuvo promover y estimular la actividad de los jóvenes, acercar a los jóvenes bioquímicos siendo o no dirigentes a FABA, la entidad madre que nos cobija a todos para que conozcan de cerca esta institución. En esta política Álvarez ha sido pionero y yo voy seguir en esa línea.

• ¿Participa el Distrito actividades dirigidas a la comunidad?

El distrito se ha volcado a la comunidad dando charlas o presentándose en algunas exposiciones con el respaldo científico de la Fundación Bioquímica Argentina a través de sus distintos programas. Charlas en temas de salud pública, manejo de alimentos, controles en salud preventiva.
A veces la propuesta de este tipo de actividades viene de parte de los Círculos y en esos casos el distrito aporta los auspicios y recursos necesarios para llevarlas adelante.

• ¿Qué rol juega el bioquímico en la comunidad d|e su Distrito?

El rol del bioquímico en la comunidad ha ido creciendo mucho y dentro del equipo de salud su papel es indiscutido porque es un eslabón fundamental mediante el aporte de los datos del laboratorio para el diagnóstico, seguimiento de tratamientos y la prevención.
Vemos que en las localidades pequeñas donde no hay grandes centros de salud el bioquímico es un profesional de consulta permanente.
También se da la participación de bioquímicos en charlas y debates en los medios de comunicación, situación que antes no se daba. Evidentemente hemos ido ganando un espacio de reconocimiento.
Sin embargo, y a pesar de que el trabajo de laboratorio es muy absorbente es necesario que salgamos un poco del ámbito laboral para abordar los medios de comunicación porque el bioquímico es un actor muy importante, y si no hemos tenido mayor reconocimiento es porque nosotros no hemos sabido comunicarlo.
Los bioquímicos tenemos una sólida formación que nos habilita a desarrollarnos en varios campos profesionales sin embargo, la gran mayoría se dedica al laboratorio clínico exclusivamente. Las incumbencias de nuestra profesión incluyen las áreas forenses, bromatología, medioambiente, entre otros, temas que impactan directamente en la comunidad.
Es importante que los que estamos ocupando cargos dirigenciales ya sea en los niveles regionales o centrales promovamos nuestra actividad, demos a conocer las bondades de nuestra actividad y de nuestras instituciones como FABA. A veces desde el interior no se alcanza a entender la organización y conducción de esta institución de tanta envergadura.

• ¿Cuál ha sido el crecimiento poblacional de su Distrito?

Excepto Tandil y Olavarría las demás localidades no han crecido en población. Tandil ha crecido mucho en los últimos años como pujante polo turístico, además de su desarrollo industrial y agropecuario. Azul es una ciudad eminentemente administrativa. Y Olavarría es la ciudad del trabajo porque tiene industrias, talleres, empresas y ha crecido mucho ante la demanda de mano de obra. El resto de las localidades se mantiene estable, salvo algunas localidades que pertenecen al tercer cordón del conurbano bonaerense como San Miguel del Monte, Lobos, y Roque Pérez que están teniendo actividad industrial y radicación de gente para dejar de ser zonas exclusivamente rurales.

• ¿Cómo resultó el proyecto de referente local implementado por la gestión anterior?

Desde San Miguel del Monte, en el extremo norte, hasta Laprida, al sur, hay casi 400 km de distancia, eso hace difícil que se puedan asistir a las reuniones del Distrito en la sede de Azul. Esa distancia se ha podido acortar mediante los medios de comunicación por internet. Sin embargo, Álvarez logró generar un compromiso con los colegas de las localidades más lejanas y los convocó a través de la implementación de los referentes locales. Una iniciativa para redistribuir de modo organizado una persona que actuara como nexo entre la localidad, la región y el distrito de manera de tener un intercambio, de modo que cuando había que tomar alguna medida el referente local tenía la voz y volcaba las inquietudes de su zona. Se implementó muy bien y es una herramienta organizativa con la que contamos, aunque no se ha puesto en marcha últimamente porque no ha sido necesario. Pero ha sido muy útil en situaciones que lo han requerido como fue en su momento el reclamo ante obras sociales como Banco Provincia o Luz y Fuerza.

• ¿Algún comentario final?

Sí. Quiero agradecer por este medio a todos los colegas que han depositado en mí la confianza necesaria para ejercer la conducción de nuestro Distrito. Y también a las autoridades de FABA que desde un principio me abrieron las puertas de esta noble Institución y me alentaron a asumir cargos de mayor compromiso.