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Institucionales

El bioquímico, una pieza clave en el equipo de salud
Se acerca la fecha de la conmemoración del Día del Bioquímico, el próximo 15 de junio, y FABA-Informa dialogó con el doctor Alberto Torres, presidente de la Federación Bioquímica de la provincia de Buenos Aires, quien definió el alcance y la responsabilidad social de una profesión con vocación de servicio

¿Cuál es el rol del bioquímico actualmente como integrante del equipo de salud, y cuál su protagonismo y percepción en la comunidad?
El bioquímico cumple un rol decisivo como integrante del equipo de salud, hay un dato que respalda esta afirmación, el 75 % de los diagnósticos necesitan de la participación de los análisis clínicos para su confirmación.
Hoy, el bioquímico es un profesional de consulta permanente por parte del resto de los componentes del equipo de salud. Sin embargo, creo que deberíamos dar un paso más, incluir en los informes emitidos por el profesional bioquímico, observaciones que complementen la historia clínica que elabora el médico, que surgen del diálogo, necesario e inevitable, que en la etapa preanalítica mantiene el bioquímico con el paciente.
Estoy haciendo referencia a sugerir por ejemplo, pruebas complementarias y/o confirmatorias, alertar ante posibles interferencias con la medicación que toma el paciente, entre otras.
A mi modo de ver, en la actualidad, la sociedad reconoce al profesional bioquímico, pero es para nuestras instituciones una materia pendiente difundir y promocionar aun más el rol del bioquímico, el lugar que ocupa en el equipo de salud y la responsabilidad social que asume ante la comunidad.
Quizás dicha difusión es necesaria en las grandes ciudades, en otros lugares, me consta a través de mis reiteradas visitas al interior, el bioquímico ocupa un lugar de privilegio en la percepción de su comunidad.

¿Qué desafíos considera primordiales para un profesional al frente de un laboratorio de análisis clínicos?
La formación de grado de nuestros profesionales bioquímicos es de muy buen nivel, pero el avance vertiginoso en cuanto a tecnología y al desarrollo de nuevas determinaciones, obliga al profesional al desafío de estar permanentemente actualizado. Quienes ejercen su profesión en lugares alejados de las principales ciudades tienen doble barreras de accesos, la distancia y los costos que representa asistir a jornadas, cursos o congresos.
Es allí donde nuestras instituciones cumplen un papel fundamental, acercando al lugar de trabajo del bioquímico a docentes, investigadores y profesionales destacados, organizando cursos a distancia, labor que lleva adelante, con éxito, nuestra Fundación Bioquímica Argentina.
Otro desafío es proveer a nuestros profesionales de las herramientas de gestión y administración necesarias, para hacer frente a la complejidad que enfrentan hoy nuestros laboratorios. El bioquímico es responsable de una unidad compleja, debe cumplir con la legislación vigente, con los estándares de calidad actuales, poseer conocimientos de informática, manejo de recursos humanos y nociones de costos que le permita hacer viable económicamente su laboratorio frente a aranceles rezagados y atrasos reiterados en los pagos por parte de los financiadores.
Juntos, bioquímicos e instituciones, debemos aceptar estos desafíos, y convertir estas dificultades en una fortaleza más de nuestro ejercicio profesional.

¿ Qué competencias profesionales lo posicionan en un lugar decisivo a la hora de definir un diagnóstico y un tratamiento?
El perfil profesional del bioquímico aplicado a los análisis clínicos es muy amplio, su formación lo capacita en campos tan variados como genética, microbiología, virología, toxicología, farmacología, inmunología, nanotecnología, bioestadística, por nombrar las de mayor desarrollo en la actualidad . Posee conocimiento de la organización y función de los sistemas biológicos a nivel molecular, a esto se suma la capacidad de transmitir información a otros profesionales, como también a un público no especializado.
Todo este bagaje de conocimientos y la permanente actualización profesional del bioquímico, aplicadas en las fases pre y post analítica, lo posicionan en un lugar insustituible al momento de definir un diagnóstico y tratamiento.

¿Qué lugar ocupa el desarrollo de las nuevas tecnologías en el ejercicio profesional y de qué manera inciden en la calidad de la prestación?
Los avances tecnológicos constituyen un gran aporte en la etapa analítica. No sustituyen la tarea del profesional, por el contrario es bajo la supervisión del bioquímico, que acortan los tiempos, y sostienen un nivel de calidad como el que merecen los pacientes que solicitan nuestro servicio profesional.

¿De qué manera puede participar el bioquímico ante los conceptos imperantes de la medicina preventiva?
Creo que hemos superado la etapa de acudir, solo al diagnóstico y tratamiento de la enfermedad. Hoy el concepto que predomina es atender la salud. Prevenir, promocionar y educar para el cuidado de la salud con el fin de lograr así una mayor calidad de vida que acompañe las distintas etapas de la existencia de una persona, esto adquiere gran importancia teniendo en cuenta que en la actualidad en nuestro país el promedio de vida supera los setenta años.
Es fundamental aplicar estos criterios con mayor énfasis, en los grupos poblacionales más vulnerables. Sin ninguna duda, nuestro sector bioquímico ha sido, desde hace más de veinte años, el que ha dado rápidas respuestas en estos conceptos, prueba de ello es el Programa de Errores congénitos, dirigido a todos los nacidos vivos tanto en establecimientos privados como en los hospitales provinciales y municipales. Hoy brindamos cobertura al 98 % de los nacidos vivos en la provincia de Buenos Aires.
De igual forma participamos en programas de prevención junto a la Obra Social Provincial, IOMA, el Seguro Público de Salud y con varias Obras Sociales y municipios de nuestra provincia.

En su carácter de presidente de FABA, ¿qué mensaje les haría llegar a los bioquímicos de la provincia de Buenos Aires en esta nueva conmemoración del Día del Bioquímico?

Quiero saludarlos y expresarles mi orgullo por representar a los bioquímicos de la Provincia de Buenos Aires, quienes día a día demuestran su calidad profesional y el compromiso social que asumen desde su lugar de trabajo.
Lamentablemente los financiadores, obras sociales sindicales, la Obra social Provincial, las prepagas y el PAMI, no retribuyen en igual medida a los bioquímicos, a través de los aranceles que nos reconocen. Hoy el atraso arancelario es superior al 30%.
Juntos hemos superado dificultades en el ejercicio de nuestra profesión, y juntos seguiremos bregando para que el esfuerzo diario realizado por nuestros profesionales tenga el reconocimiento de los financiadores en particular y de la sociedad en general.

A los colegas : ¡FELIZ DIA DEL BIOQUIMICO!

 

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